Desde hace un tiempo las marcas influyen en las personas, en sus pensamientos, crean emociones y provocan sentimientos. Esto no lo consiguen todas las empresas, sino aquellas que han trabajado en su posicionamiento de marca y cuentan con una buena estrategia de branding. Pero para lograr una buena y exitosa estrategia de desarrollo de marca hay que dedicar mucho tiempo, trabajo, análisis y creatividad.
Qué es el branding
Cuando hablamos de branding, hablamos de una estrategia que consiste en la construcción de una marca, es decir, en formar sus atributos, sus valores y sus características principales como, por ejemplo, la visión, la misión, la identidad visual, sus comunicaciones, sus acciones, etc.
Las personas están expuestas diariamente a un gran número de impactos de marcas a través de la televisión, las redes sociales, etc., que son imposibles de retener en su totalidad y que incluso pueden llegar a ser molestos.
Por ello, el objetivo principal de una estrategia de branding es ganarse un lugar en la mente de los consumidores, a través de la personalidad de la marca:
- Generando un conjunto de sensaciones y experiencias en el público.
- Consiguiendo que reconozcan los valores de la marca y se sientan identificados con ella.
Una estrategia de branding no se centra en vender producto, sino en vender la marca, una experiencia y valores positivos. Lo que ayudará a conseguir una audiencia más fiel, ya que la marca será más recordada por el público y contará con un posicionamiento más sólido y duradero.
Tipos de branding
Existen distintos tipos de branding y cada uno de ellos realizará distintas actividades de branding según su objetivo:
- Branding comercial: su objetivo es diferenciar a tu empresa de la competencia. Consiste en la construcción y preparación de una marca y la asociación de esta con un concepto específico, por ejemplo, Google está asociado con buscador web.
- Branding personal: realizado por personas que quieren trabajar su marca personal, proyectar una cierta imagen al público y transmitirles confianza.
- Branding político: consiste en la construcción de marca ligada al gobierno o a sus candidatos. A través de la gestión de activos y recursos, se pretende transmitir confianza y lealtad y conseguir que el candidato sea percibido positivamente por el público.
- Branding social: es un tipo de branding que sirve para aportar valor a la marca, a través de sus acciones la marca muestra su responsabilidad social, por ejemplo, donando un porcentaje de sus ventas a una asociación benéfica. Ayuda a crear un vínculo de confianza con la audiencia y a humanizar la marca.
- Digital Branding: consiste en trabajar la relación entre las marcas y las personas a través del social media, el marketing de influencia, de contenidos, email marketing, de búsqueda, etc.
- Branding emocional: el objetivo es conectar con las emociones del público a través de distintas estrategias como, por ejemplo, contar historias que logren conmover al consumidor.
Cuáles son los elementos de una estrategia de branding
Son seis los elementos principales de una estrategia de desarrollo de marca que te ayudarán a transmitir la imagen que desees y conectar con tu público objetivo.
1. Objetivo
Debes tener claro cuál es el propósito de tu empresa, cómo vas a posicionar tu marca y qué es lo que te va a diferenciar de tus competidores. El objetivo puede ser funcional, se centra en generar beneficios, o intencional, consiste en cómo el éxito te ayudará a conseguir beneficios económicos y a aportar beneficios al mundo.
2. Consistencia
Tus comunicaciones deben ser coherentes, hablar de temas que se relacionen con tu marca y que le aporten elementos beneficiosos, utilizar los mismos colores, el mismo tono de voz, que los empleados utilicen el mismo estilo comunicacional, etc., para conseguir una comunicación sólida y lógica. Así, conseguirás reconocimiento de marca por parte de tu audiencia.
3. Emoción
A las personas les gusta relacionarse, sentirse conectados a otros y crear vínculos afectivos. Quieren sentir que forman parte de un grupo, por ello debes encontrar una manera de conectar con tus clientes a nivel emocional para consolidar la relación y potenciar su lealtad.
4. Flexibilidad
Debes respetar la consistencia de tu marca, pero debes saber ser flexible para realizar pequeños cambios y ajustes que te permitan estar al día, aumentar el interés de tu público objetivo y diferenciarte de la competencia.
5. Lealtad
Recompensa a ese público que elige siempre a tu marca como primera opción, son personas que van a actuar como embajadores de tu marca hablando de tus productos, escribiendo sobre ti, etc. Esto te ayudará a obtener más beneficios. Conserva la lealtad de esos consumidores y consigue que sigan eligiendo tu marca por encima de todo.
6. Competencia
Investiga a tu competencia y observa sus estrategias. De esta manera, podrás saber que estás haciendo bien y que estás haciendo mal, lo que te ayudará a entender cómo mejorar tu estrategia e incrementar el valor de tu marca.
Cómo puedes elaborar tu propia estrategia de branding
Análisis
El primer paso para elaborar una estrategia de branding es analizar la situación externa e interna de tu marca, es decir, analizar el entorno donde se va a actuar, a la competencia y al público objetivo.
Elaborar un análisis DAFO te ayudará en esta tarea, señalar las debilidades y fortalezas de tu marca y las amenazas y oportunidades del mercado te permitirá encontrar tu elemento diferenciador para posicionar tu marca.
Personalidad de marca
El segundo paso es crear la identidad de marca para posicionar la misma en el mercado. Dentro de este apartado tienes que definir el objetivo de tu marca teniendo muy claro cuál es tu buyer persona, ya que será más fácil dirigir las acciones hacia este si lo tienes bien definido y, por lo tanto, conseguirás un mejor posicionamiento de marca.
También debes definir los valores que caracterizan a tu marca y que le dan un valor añadido y distintivo, así como la misión de la empresa. De ello depende que los consumidores confíen o no en la marca y sus productos o servicios.
Elementos visuales
El tercer paso es crear la identidad visual para transmitir esos valores a los clientes, a través del naming, el logotipo, los colores corporativos, el eslogan y el claim. Es decir, crear los elementos con los que el usuario va a reconocer a tu marca y sus valores.
Definir acciones
Por último, ya puedes arrancar con las actividades de branding, es decir, ya puedes iniciar las acciones para trabajar el posicionamiento de tu marca, que deben ir en consonancia con la imagen de la misma. Algunas de estas acciones pueden ser, por ejemplo, contacto con la prensa, página web corporativa, email marketing, redes sociales, merchandising, eventos, acciones solidarias, etc.
En definitiva, el objetivo principal de una estrategia de branding es construir una marca que transmita experiencias y valores al público objetivo, lo que le permite generar confianza y crear vínculos con el mismo. Para ello hay que invertir mucho tiempo y esfuerzo en análisis y creatividad. Si no dispones de este tiempo, siempre puedes contar con la ayuda de nuestra agencia de marketing digital.